Este sábado se celebra en Burgos la Noche Blanca, con un montón de actividades y eventos, entre ellos la recreación de la defensa del castillo por el 34º de Línea en 1812. Aquí podéis encontrar el programa.
En verano de 1812 los aliados derrotaron a los franceses en la Batalla de los Arapiles, obligando a José Bonaparte a retirarse de la parte sur de la península.
El 1 de Septiembre de 1812 Wellington salió de Madrid con siete divisiones del ejército aliado para enfrentarse al ejército francés de Portugal al mando ahora del general Claussel, (que sustituía a Marmont tras la derrota de Arapiles). Por tubo que dejar tres divisiones en puntos clave para proteger su línea de suministros de los posibles movimientos de los ejércitos franceses del Centro y de Levante. El 14 de septiembre, ejército español de Galicia del general Castaños (unos 15.000 hombres) se unió al ejército anglo-portugués. Wellington intento cortar la retirada de los franceses que estaban en Valladolid.
Por su parte Claussel abandonó Valladolid el 7 de septiembre, retirándose a Burgos. A donde llegó el 17 de Septiembre y al día siguiente se replegó a Briviesca a esperar los refuerzos del ejército del Norte. En Burgos solo se quedó una guarnición en el castillo de Burgos al mando del general Dubreton, gobernador de la plaza. La guarnición estaba formada por unos 2.000 soldados:
- 2 batallones del 34º de Infantería Línea
- 1 batallón del 130º de Infantería de Línea
- 1 compañía y media del 6º regimiento artillería a pie con 9 piezas pesadas (18 lb), 11 piezas de campaña (12 y 8 lb) y 6 obuses
- 1 compañía de zapadores
En 1808 a la llegada de los franceses, el castillo está en estado ruinoso, pero su posición es ideal para cubrir los puentes sobre el Arlanza y los caminos que se cruzan en la cuidad. Por orden expresa de Napoleón, se reforzaron y mejoraron las defensas del castillo, también se proyectó la construcción de nuevas fortificaciones. A 250 metros del castillo, se encuentra en colina de San Miguel que domina el castillo, en ella se inicia la construcción de un hornabeque y varios pequeños reductos. En 1812 las defensas se había mejorado, pero el hornabeque de San Miguel no estaba terminado.
Aquí podéis encontrar un enlace muy interesante con la cartografía del castillo.
Mas enlaces con fotos del estado actual del castillo.
Los aliados, llegaron a la capital el mismo día 18. Wellington puso sitio al castillo con dos divisiones de infantería (la 1ª y la 6ª) y 3 cañones de 18 lb y 5 obuses de 24lb (bastantes escasos para la tarea a realizar), mientras el resto de tropas se dirigieron a Monasterio, para vigilar a las tropas de Claussel.
19 de septiembre de 1812 :
Esa noche tropas de la 1ªDiv británica asaltaron y se apoderaron de los reductos exteriores del hornabeque. Los franceses contratacaron pero fueron rechazados. A continuación los portugueses de la brigada Pack y los escoceses del 42º asaltaron el hornabeque, pero fracasaron ya que las escaleras eran cortas, por lo que se retiraron con muchas bajas. Las 2 compañías ligeras consiguieron superar las empalizadas atacando por la retaguardia del hornabeque (aun sin terminar). Los franceses ante el riesgo de ser rodeados se retiraron al interior del castillo. Los ingleses en una noche, habían tomado el hornabeque con 7 piezas de artillería y causado 140 bajas, a cambio de 400 bajas propias.
20 y 21 de septiembre de 1812.
La artillería francesa bate el hornabeque, ralentizando los trabajos de zapa y causando bastantes bajas. Los aliados no tenían zapadores profesionales y los trabajos se realizaban con voluntarios extraídos de la infantería, esto hacia que los trabajos progresasen lentamente.
22 de septiembre de 1812
Se terminan los trabajos de la primera batería británica en la colina de San Miguel, con dos cañones y tres obuses. Animado por el éxito del asalto anterior, Wellington, decidió lanzar un nuevo asalto sin esperar a que la nueva batería pudiese abrir una brecha. Este asalto saldría del arrabal de San Pedro, 400 voluntarios de la 1ª Div. con 5 escalas (esta vez más largas), se montó también un ataque de diversión por 150 portugueses de la 6ª Div. Pero el asalto fracaso con un 40% de bajas, incluido el oficial al mando.
23 de septiembre de 1812
Después del fracaso del día anterior, se volvió a los trabajos de asedio, batiendo las murallas con la artillería y comenzando los trabajos de mina. También se comenzó a cavar aproches desde el arrabal de San Pedro hacia la primera muralla del castillo. Los trabajos se observan desde el castillo y Dubreton redespliega las piezas de artillería para evitar perderlas en la explosión de la mina. Además manda construir barricadas tras el muro obstaculizar el paso y servir de segunda línea de defensa.
En el cerro de San Miguel los británicos terminan los trabajos de segunda batería con 6 piezas de 18 lb y se comienzan a cavar las trincheras para fusilería
25 al 28 de septiembre 1812
La primera batería disparara sin parar, aunque los resultados son bastante decepcionantes. El resto de trabajos de zapa continúan.
29 de septiembre de 1812
La mina alcanza los cimientos del primer muro. Se hace estallar a primera hora de la madrugada, destruyendo parte del muro pero, no el talud posterior. Una columna de 300 hombres de la 1ªDiv asalta la brecha, sólo 5 consiguen escalarla, el asalto fracasa.
30 de septiembre de 1812
Se inicia la construcción de una segunda mina desde el arrabal de San Pedro y la construcción de la tercera batería de tres cañones, en esa zona a tan solo 60 metros de la muralla.
1 de octubre de 1812
Los franceses localizan los trabajos en la tercera batería y durante todo el día lo machacan con sus disparos, desmontando dos de los cañones. Esa misma noche se abandonan los trabajos en la tercera batería y se comienzan los trabajos de la cuarta batería en la misma zona pero más a cubierto de la artillería francesa.
2 y 3 de octubre de 1812
Los franceses baten la cuarta batería, que sufre el mismo destino que su predecesora, al final los cañones se trasladan a la primera y segunda baterías.
4 de octubre de 1812
La segunda mina está preparada para estallar. Se despliegan varios cañones de campaña en torno al castillo para aumentar la presión. Los disparos de la primera batería han ensanchado a 18m la brecha creada por la primera mina. La explosión de la segunda mina abre una segunda brecha de 30m, provocando muchas bajas entre los defensores, que no habían localizado los trabajos de esta mina. Un batallón completo del 24º asalto el asalta las dos brechas, obligando a los defensores a retirarse tras la segunda muralla. Inmediatamente los británicos despejaron las dos brechas y comenzaron los trabajos hacia la segunda muralla, bajo el continuo fuego de los defensores.
Nuestro camarada Zamanillo, ha hecho para este magnifico diorama del momento del asalto a las dos brechas, todos los que os acerquéis este sábado al castillo de Burgos podréis verlo y asistir a la charla que Diego Peña dará explicando los detalles de esta acción.
5 de octubre de 1812
Por la tarde, Dubretón ordena la salida dos compañías y un destacamento de zapadores (200 hombres), sorprenden a los británicos, causando numerosas bajas y destruyendo el equipo y los trabajos realizados en las brechas. A la noche se retiraron a la segunda muralla.
6 y 7 de octubre de 1812
Se retoman los trabajos en las brechas, la segunda batería consigue abriendo una nueva brecha en el muro norte.
8 de octubre de 1812
Nueva salida de la guarnición esta vez las 3 compañías de granaderos y un destacamento de zapadores (400 hombres), atacando de madrugada el mismo lugar que la vez anterior. Sorprenden a la Kings German Legión (KGL), pero no a los portugueses de la brigada Pack. De nuevo se destruyen los trabajos realizados en las dos brechas.
De 9, 10 y 11 de octubre de 1812
La lluvia cae con fuerza paralizando casi por completo los trabajos de zapa.
Del 12 al 17 de octubre de 1812
Se reanudan los trabajos en las brechas, el 17 se termina otra mina esta vez en la iglesia de San Román. Se hacen los preparativos para un gran asalto.
18 de octubre de 1812
Al amanecer los cañones de la segunda batería nº2 consiguieron abrir aún más la brecha norte en la muralla exterior. A las 16:30 se hizo explosionar la mina situada en la iglesia de San Román, comenzando el asalto general. La explosión voló parte del edificio y los franceses se retiraron al interior del castillo. La Iglesia fue asaltada por tropas del 9º de Caçadores y el 1º Reg. de Asturias. Pero los franceses tenían preparada una desagradable sorpresa hicieron estallar su propia mina bajo los restos de la iglesia, causando 200 bajas entre los soldados españoles y portugueses.
Al mismo tiempo, los Guardias de la 1ª Div inglesa asaltaron desde las dos brechas en la primera muralla, llevando a tomar el parapeto, pero un contraataque de las reservas francesas les obligo a retirarse. En la brecha norte la KGL consiguió tomar la brecha e intentaron conectar con las tropas británicas que asaltaban las otras dos brechas, pero al final también tuvieron que retirarse.
Aunque las tropas se habían batido con gran valor, el asalto fue rechazado costando unas 500 bajas a los británicos por 80 a los franceses. La moral de los aliados estaba por los suelos.
19 y 20 de octubre de 1812
Wellington prepara la retirada y lentamente se empiezan a retirar las tropas del asedio.
21 de octubre de 1812
Wellington dio la orden definitiva de retirada. Se recuperaron todos los cañones útiles y se destruyó todo lo que no podían llevarse. Se voló el hornabeque de San Miguel, aunque con poco éxito.
22 de octubre de 1812
Una patrulla de reconocimiento sale del castillo y confirmo la retirada del enemigo. Ese mismo día tropas del ejército de Claussel entraron en Burgos, relevando a la guarnición del castillo.
CONCLUSIONES
El asedio duró 35 días, en los cuales los franceses sufrieron 623 bajas (muertos, heridos, prisioneros y desaparecidos) y los aliados 2064. La escasez de artillería pesada británica limito mucho las opciones durante el asedio, así como la falta de un cuerpo de zapadores entrenados. Se calcula que la construcción de la galería de la primera mina (18 metros de largo) costo el doble de tiempo (108 horas) que de lo estipulado para una compañía de zapadores. Por su parte Dubretón supo reaccionar a todos los movimientos de Wellington, contraatacando siempre que pudo.
Un saludo.